LOS GLADIADORES, A MARINGÁ EN BUSCA DEL TÍTULO Y DEL PASAJE A EGIPTO 2021

Luego de una preparación que incluyó un triunfo - en la despedida del público argentino - frente a Uruguay, el plantel conformado por Manolo Cadenas viajó a Brasil. 
En su primera presentación enfrentó a un débil equipo de Bolivia, que no solo tiene un nivel muy bajo, sino que además el micro que los trajo desde su país tuvo un accidente en el viaje. Al menos 4 se lastimaron y no pudieron jugar. Como no había llegado el pago de la Federación Boliviana no los dejaron en el hotel con el resto de los equipos. Los llevaron a un dormi de un ente deportivo. Así fue como se presentaron, disminuidos física y anímicamente. ¿Resolvió bien la organización teniendo en cuenta la situación vivida?

Es uno de los ejemplos de lo que está sucediendo en Maringá, con servicio deficiente, precariedad desde el micro que trasladó al plantel argentino y hasta con zonas comunes del hotel, ambos, sin aire acondicionado. Recordemos los 35 grados que hace habitualmente. 

En cuanto a la comida inadecuada para deportistas de alta competición.

Lugares de entrenamiento sin el mantenimiento correspondiente....

Vestuarios incómodos, con duchas eléctricas.... no hay mucho para agregar. Aunque como corolario, las pantallas argentinas de televisión comenzaron a hacerse eco de la situación - inesperada - con el Graf "CAMAS CON PULGAS Y MICROS DESTARTALADOS" Todo dicho...

Lo que necesita el deporte para crecer, evolucionar y llegar a los primeros niveles es buena organización y para esto, gente idónea para llevar adelante la misma. Esta vez, faltaron demasiados elementos para considerarla eficiente. 

Una pena, ya que desmerecen un torneo continental, e ignora a los jugadores seleccionados, que representan lo mejor del handball de cada país. Que esto haya sido solo un papelón organizativo y, sobre todo, sirva de experiencia para tomar los lógicos recaudos para la próxima ocasión. RD